El proyecto se concibió como una vivienda aislada, priorizando la seguridad, confort térmico y eficiencia energética. La distribución se organiza en una planta en forma de «X», con un volumen central que orienta la casa hacia el sol del noreste y optimiza la ventilación pasiva. El diseño incorpora un núcleo rígido de hormigón armado, una estructura de acero para la doble altura y un sistema prefabricado de paneles aislados (SIP) en el 65% de la vivienda. La construcción se llevó a cabo mediante un contrato de administración delegada, con alta participación del cliente en el proceso.